Técnicamente Evan MacLane no es un refuerzo. Si nos apoyamos en la norma que estila salir a buscar a este tipo de jugador entonces el zurdo norteamericano es una especie de auto invitado.
Sí, así como se lee. MacLane originalmente no estaba en planes de las Estrellas Orientales para la temporada de béisbol invernal que casi concluye, pero una movida poco habitual por parte del lanzador ha dado vida a una de las historias más interesantes en mucho tiempo.
MacLane vino sin ser llamado. En pocas palabras, el zurdo se costeó su propio viaje a República Dominicana con la intención de probar suerte en el circuito.
Vino a hacer “tryout” para hacer el equipo verde. “Sí, yo mismo me presenté voluntariamente”, dijo el lanzador de 31 años sobre su llegada esta temporada a los campos de entrenamientos de las Estrellas Orientales, su equipo original.
“No tenía trabajo y yo mismo me puse en contacto con ellos. Me dijeron que no me garantizaban nada, pero que me permitirían que un coach de pitcheo me evaluara y si era de su agrado me quedaría con ellos, entonces agarré un vuelo y aquí estoy”.
Evan ya había trabajado en tres anteriores campañas con la franquicia de San Pedro de Macorís, pero sus problemas de lesiones hizo dudar a los ejecutivos de esa organización sobre su contratación.
Pero resulta que finalmente se ganó su puesto. MacLane estuvo sano toda la temporada, tanto que abrió once partidos y concluyó con marca de 2-2, con 2.09 en promedio de carreras limpias permitidas, el segundo mejor del circuito en la serie regular.
Las Estrellas (19-31) se quedaron fuera de la postemporada, así que MacLane fue tomado por los Gigantes del Cibao en el sorteo de importados de cara al Round Robin. Tampoco defraudó en esa organización, mientras su fama de zurdo con calidad se expandía.
En esa instancia tuvo registro de 2-0 y PCL de 3.20 en cuatro aperturas para los Gigantes, una actuación que despertó el apetito de los Leones del Escogido, quienes lo escogieron de primero para el sorteo de la Serie Final. Ya ayudó a los Leones a obtener el primero de una seguidilla de tres triunfos (sin incluir el juego de anoche) ante los Tigres del Licey después de caer 0-3 en la final y precisamente hoy está señalado para abrir por los Leones, una oportunidad para obtener una segunda victoria, nada mal para un tipo que se agenció su propia contratación.
Tendrá pasaporte dominicano
¿Sorprendido con sus millas recorridas en la pelota local? “En realidad, no”, dice Evan, quien tuvo dos salidas con los Cardenales de San Luis en la campaña de 2010 en Grandes Ligas.
“Desde que vine a las Estrellas sabía que estaba saludable y que tenía condiciones para hacer un buen trabajo, y creo que por eso he tenido la habilidad de mantenerme con diferentes equipos”, agrega.
MacLane aparentemente se ha ganado una quinta incursión en la pelota dominicana el próximo año. Es que, pasar de desempleado a pieza clave con tres equipos distintos en una misma temporada es la mejor carta de recomendación para cualquiera.
Ciertamente, Evan es de esta liga: literal y figurativamente. “Bueno, lo primero es que el año entrante voy a tener mi pasaporte dominicano”, reveló el afable jugador. “Conozco a los jugadores de todos los equipos y siempre estoy en proceso de aprendizaje, por eso los ajustes”.
Habrá que esperar qué tan rápido pueda MacLane cambiar su estatus migratorio. En un eventual caso de que consiguiera su propósito entonces pasaría de ser jugador refuerzo a uno nativo, lo que lo enviaría a un sorteo que lo dejaría en cualquier equipo de la liga. l
Un recorrido por el béisbol de EE.UU.
MacLane nació el 4 de noviembre de 1982 en Chico, California. El 3 de junio fue drafteado por los Mets de Nueva York en la ronda 25 del sorteo amateur en 2003. El 22 de agosto de 2006 fue enviado a los Cardenales de San Luis desde los Diamondbacks de Arizona como parte de un acuerdo.
El 9 de noviembre de 2009 se declaró agente libre y el cuatro de enero del año siguiente fue firmado por los Cardenales, equipo con el que debutó en las Grandes Ligas el siete de julio de 2010. Meses después se declaró agente libre nuevamente.
