La JCE solicitó a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) no ponderar la demanda interpuesta por hijos de haitianos, ya que en el país hay un proceso judicial abierto. La Junta Central Electoral (JCE) en su documento de defensa explicó que los demandantes tienen un proceso abierto por ante el Tribunal Constitucional cuyos resultados pudieran ser contradictorios a lo que pudieran ser recomendados por la CIDH.
Además, destacó que “ninguno de los actuales reclamantes han sido turbados en sus derechos y que ejercieron su acción en Primer Grado, que lo están haciendo en Segundo Grado, que ejercen el derecho al tránsito, a la educación, a la libre reunión”. Explicó ante la CIDH que si acoge la solicitud de una medida cautelar, no aporta a la expresión libre y legítima de los reclamantes ni del Estado, sino que “obraría contrario a lo que establece el artículo 46 de la Convención Americana Sobre Derechos Humanos”.
Precisó que para que una comunicación o petición presentada sea admitida, en virtud del artículo 44 de la referida convención, respecto a las actuaciones de esta comisión “se requiere que se hayan agotado los recursos de jurisdicción interna, conforme a los principios del Derecho Internacional generalmente reconocidos”.
La posición de la JCE fue explicada por la doctora Rosario Graciano de los Santos, miembro titular del pleno de esa entidad, debido a que ninguno de los reclamantes han sido turbados en sus derechos en República Dominicana, ya que ejercieron su acción en primer grado, que lo están haciendo en segundo grado, pues estos casos están en manos del Tribunal Constitucional que proximamene dictará su sentencia.
