La jueza de La Romana, acusada de extorsionar a un empresario con US$6,000, también es investigada por la Procuraduría. Se le acusa de faltas graves en el ejercicio de sus funciones. La jueza Altagracia Sánchez Molina, de la Cámara Civil y Comercial de La Romana, será sometida a juicio disciplinario el próximo viernes 10 de febrero.
Según anunció ayer el Consejo del Poder Judicial, Sánchez Molina es señalada como responsable de emitir sentencias parcializadas a cambio de dinero.
Se recuerda que la magistrada también fue acusada de pedir US$6,000 a un empresario a cambio de emitir un fallo favorable.
El Consejo del Poder Judicial explicó que la jueza tendrá que responder a las serias acusaciones y pruebas que se presenten en su contra, mientras el Ministerio Público evalúa la posibilidad de un sometimiento con sanciones penales.
La audiencia está pautada para las 10:00 de la mañana. El Consejo del Poder Judicial informó que al menos ocho jueces están bajo investigación.