Desde hace buen tiempo hemos sentido cierta inclinación por la escultura y, a pesar de que no es precisamente de esta modalidad de la que solemos escribir, en esta ocasión lo entendemos necesario, así porque nos ha parecido válida y de gran valor la reciente puesta en escena que presentaran varios creadores bajo el título “El Madero”.
Sin embargo, es de nuestro particular interés que sea el propio lector quien procure acercarse a la sala de exposiciones temporales de APEC Cultural ubicada en la Ave. Máximo Gómez para que conozca más de esta muestra, pues más que entrar en consideraciones formales sobre las esculturas presentadas, hemos entendido oportuno entrar en reflexiones generales, pues ante tantos y tan buenos trabajos, sería lamentable dejar alguno por mencionar, tal como deviene harto comprometedor citar algunos nombres entre los creadores, pero que debemos citar como referencia entre los cuales se encuentran obras de: Miguel Estrella (padre e hijo), Gaspar Mario Cruz, José Rotellini, Pedro Méndez, Freddie Cabral, Genaro Reyes (Cayuco), Alberto Ulloa, Luís Martínez Richez, Andrés Lantigua Gómez, entre muchos otros.
Y es que los anales de nuestra propia isla nos conducen a la talla como medio de expresión, pues desde nuestros primeros padres: los aborígenes, ya se concebían piezas de extraordinaria elaboración, pero es en la etapa colonial en que toma auge este modo de representación. Esa tradición se sigue asumiendo con el tiempo, de ahí que para esta entrega la madera sea el medio por excelencia, resultando de ella, fundamentalmente de la caoba, piezas únicas que bien refieren el ánimo del artista en función de su pensamiento, pero al mismo tiempo expresan el sentimiento y la memoria que remite la propia esencia del material. Pues resulta que cada madera tiene su historia y ésta se hace más rica y diversa en función de la sensibilidad primero del artista y luego del receptor.
Ahora bien, este tipo de iniciativas de la Unión de Escultores Dominicanos con el apoyo del Consejo de Directores de APEC merece especial atención, ojalá se pudieran conservar estas obras en instituciones, sean públicas o privadas.
