La medicina convencional, también llamada alopática, biomedicina, medicina tradicional, medicina corriente o medicina occidental es el sistema por el cual los médicos y otros profesionales de la atención de la salud tratamos la prevención o el tratamiento de los síntomas de las enfermedades con medicamentos, cirugía, radiación, etc.
La medicina convencional tuvo su nacimiento en Europa en el siglo XV, y su desarrollo se consolidó en el siglo XIX. Hasta entonces, y al inicio del siglo XX, la última palabra, y la toma de decisiones en la práctica médica, descansaban sobre figuras venerables distinguidas por su experiencia y su respetable dogmatismo.
El surgimiento de la medicina basada en evidencias (MBE) tuvo orígenes en los finales del siglo XIX con los trabajos de Claude Bernard, Louis Pasteur, Koch y otros eminentes científicos con la aplicación de metodologías rigurosas y comparativas.
a MBE se contrapone a la medicina caprichosa y autoritaria. Se trata de un cambio de paradigma, pensamiento dominante de la medicina moderna, que realmente nació en la década de los 90: toda decisión médica debe asentarse en el mejor nivel de información sobre la base de su eficacia y sus limitaciones.
Con MBE se quiere decir, simplemente, que su práctica està basada en estudios, estadísticas y la tecnología de la información a fin de descubrir y analizar los hechos, para interpretarlos y darles el valor científico.
En resumen, en la medicina basada en evidencias hay 4 pasos: formular y preguntar, buscar la información, analizar ésta científicamente y desarrollar una conducta hacia el paciente basada en las conclusiones.
