Los hospitales de salud pública del Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo estuvieron paralizados ayer por tercer día consecutivo acatando el paro de 72 horas realizado por los gremios que agrupan al sector salud.Durante estos tres días, en los centro de salud solo se estaban brindando los servicios de emergencia y atendiendo a los internos en condiciones delicadas. Varias personas con las que elCaribe conversó durante la mañana de ayer en las emergencias de los diferentes hospitales, manifestaron su satisfacción porque a partir de este viernes el personal médico volverá a atender las consultas.
“Los médicos y las enfermeras tienen todo el derecho de protestar por mejores condiciones, pero tres días es demasiado. Gracias a Dios que ya hoy (ayer) es el último día, porque nosotros los pobres somos los más afectados por esta situación”, refirió Aminta Montero, mientras esperaba a ser atendida en el área de emergencia del hospital Salvador B. Gautier.
El paro médico se cumplió en un 100% en la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, en el Salvador B. Gautier, hospital materno infantil Santo Socorro, entre otros centros del Distrito Nacional. En la provincia de Santo Domingo, entre los centros que se acogieron al paro de labores médicas están la maternidad San Lorenzo de Los Minas y el Hospital de El Almirante.
Durante el último día de protesta, las enfermeras de la maternidad de Los Minas hicieron un llamado al presidente de la República, Danilo Medina a “que incluya a los hospitales en su programa de visitas sorpresa, para que compruebe él mismo, las pésimas condiciones en las que trabaja el personal de salud de todo el país”. Los galenos demandan el 5% del PIB para salud, pensiones dignas, aumento salarial y nombramientos de personal en hospitales.
Personal de salud dice que continuará su lucha
Durante los tres días de interrupción de los servicios en los hospitales, los gremios de la salud advirtieron que continuarán su lucha por el tiempo que sea necesario y que por tal razón no descartan nuevas manifestaciones. Mientras que algunos funcionarios han expresados que hay intereses no gremiales en los paros y que son un chantaje politiquero.
