Eli Broad, multimillonario y filántropo estadounidense, murió este viernes en un hospital de Los Ángeles (California) a los 87 años tras padecer una larga enfermedad, según confirmó a The New York Times Suzi Emmerling, portavoz de la fundación Eli y Edythe Broad.

El empresario dirigía sus ganancias para remodelar el paisaje cultural de Los Ángeles. Así, aportó gran parte del dinero para reconstruir el centro de la ciudad con establecimientos gastronómicos de lujo y estructuras cívicas como el Walt Disney Concert Hall.

En 1957, Broad fundó la compañía de construcción de viviendas Kaufman and Broad junto con su socio Donald Bruce Kaufman. Al mudarse de Detroit (Míchigan) a Los Ángeles, la empresa prosperó en vista del creciente mercado inmobiliario y el clima agradable de la urbe. El multimillonario dejó de ser el director general de la compañía en 1974.

Las obras de caridad y el apego al arte

Entre sus actividades caritativas, las organizaciones benéficas de Broad donaron millones de dólares a proyectos que estaban encaminados a mejorar la educación pública y establecieron dotaciones financieras en varias universidades en todo el país.

El filántropo también era conocido por su afición al arte. En 2015, su fundación edificó The Broad, un museo en pleno centro de Los Ángeles, para exponer un total de 2.000 obras de la colección que mantenía con su esposa. Unos 3,5 millones de personas han visitado el establecimiento cultural desde su apertura.

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