En los últimos cinco años, la avenida República de Colombia ha experimentado un desarrollo inmobiliario que ha ido acompañado de un crecimiento comercial.
En todo el trayecto de la avenida que nace en la Sol Poniente y muere en la Prolongación 27 de Febrero, se han establecidos negocios de dealers de vehículos, car wash, supermercados, bodegas, puestos de comida, bancos, laboratorios, entre otros.
Cada día son más los servicios que se ofrecen al borde de la avenida. Las plazas comerciales se han vuelto frecuentes y los establecimientos de ventas de comida no se quedan atrás. La vía cuenta con un Súper Pola, El Bravo, Domino’s Pizza y Kentucky Fried Chicken, mejor conocido como KFC.
PriceSmart también forma parte de la amplia oferta comercial. Para el 2014, el Grupo Scotiabank estableció una sucursal en la avenida República de Colombia. No obstante, la vía aún tiene grandes extensiones de terrenos vírgenes.
También los desarrolladores de proyectos habitacionales han puestos sus ojos en esta avenida. Allí se ubican los residenciales, Arcoíris del Sur, Las Flores, Brisas del Norte, Jardines del Frezno, Condominio Real, Ciudad Real II entre otros.
La cercanía de la avenida con el centro de la ciudad constituye una de las razones para el crecimiento comercial.
Negociantes entrevistados por elCaribe coinciden en que el traslado de la Embajada Americana ha contribuido al crecimiento comercial de la zona en los últimos dos años.
Aseguran que el traslado de la sede del consulado de los Estados Unidos de América hacia la República de Colombia, ha cotizado el área.
Los negocios de dealers van en aumento en la avenida. En solo dos kilómetros de la vía, se han establecido ocho de estos de tipos de establecimientos.
Hace un año que Jonathan Medina estableció su negocio de venta de vehículos en la avenida. Cuenta que el crecimiento poblacional de la zona ha generado muchas oportunidades de negocios. “Son gente que necesitan tener cerca un restaurante, un banco, un supermercado, que si encuentran estos servicios en la zona, no se te van a ir a la avenida Winston Churchill”, expresa.
Explica que en su caso particular, el 60% de los clientes que buscan sus servicios no son de la zona.
Para el empresario, los servicios consulares de la Embajada Americana han dinamizado el comercio en la zona, pero asegura que esto ha sido un arma de doble filo, porque al cotizarse la avenida, los terrenos adquieren más valor.
“Esta zona no era tan cara, pero ahora ha subido mucho el alquiler de locales comerciales”, sostiene.
Consuelo Guzmán estableció su negocio de venta de piedras para el hogar hace nueve años. Recuerda que en aquel entonces, la avenida no significaba una atracción para emprender proyectos comerciales.
Explica que la venta de piedra en esta zona capitalina no es muy rentable, debido a que los desarrolladores de proyectos inmobiliarios se han inclinado por la construcción de apartamentos.
“Donde la gente utiliza más estos tipos de piedras son en casas y lo que más hay aquí es apartamentos”, dijo.
Y es que este crecimiento poblacional provoca una crisis en el tránsito cotidiano en la avenida que consta de dos carriles en ambas direcciones. “Aquí el tampón es un caos hasta en la noche”, afirma Manuel Cruz, quien junto a su padre se dedican a la venta de tinacos.
El Ministerio de Obras Públicas vio la solución del descongestionamiento vehicular en la avenida República de Colombia en la construcción de dos elevados en las intersecciones Jacobo Majluta y Monumental.
La noticia fue dada a conocer en el 2013 por el ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo, quien para esa fecha consideró que el creciente desarrollo urbanístico de la zona requería de este tipo de intervenciones. Pero el proyecto se quedó en un anuncio. Al referirse de nuevo al tema, Gonzalo Castillo reveló a elCaribe recientemente que hasta el momento en este cuatrienio de gobierno no se contempla la construcción de elevados en la avenida.
