Con los rostros cansados, hambrientos y un lastimoso desamparo, 112 haitianos permanecen acostados frente al Ministerio de Trabajo en demanda de que un empresario dominicano les pague sus prestaciones laborales. Los extranjeros afirman que en los quince días que llevan acampando frente a la institución no han recibido ninguna respuesta por parte de las autoridades ni mucho menos de la embajada de su país de origen.
Además de los obreros, el grupo está compuesto por niños, embarazadas y envejecientes, que reclaman al empresario Rafael Emilio Alonso, propietario de una coquera ubicada en el kilómetro 5 de San Cristóbal, el pago de las prestaciones correspondientes a más de 10 años de trabajo en la fábrica que aseguran cerró sus puertas de la noche a la mañana sin darles ninguna explicación.
“Nosotros sabemos que se paró el trabajo porque en la puerta había un letrero que decía “se vende o se renta” y ahí nosotros empezamos a pasar trabajo”, afirmó Francisco Ogilús, en nombre de sus compatriotas.
Ogilús recuerda que llegaron al país de manera ilegal en el año 1999 por pedimento del referido empresario a través de la frontera de Dajabón, y que luego éste los trasladó de manera clandestina hasta San Cristóbal en un camión cubierto con una lona.
Afirma que en estos días lo poco que consiguen para comer es gracias a la caridad de algunos transeúntes que se desplazan por el Centro de los Héroes y se conmueven ante la estampa.
“Nosotros hemos pasado la Navidad aquí infeliz, con frío, con hambre y la vaina que me duele es que él no tiene razón. Como él tiene derecho de mandar a buscar gente para allá, él tiene derecho también de pagarnos los cuartos de liquidación”.
Drama
Máximo Chalas, otro de los afectados, permanece en el lugar junto a su esposa Anita y sus cuatro hijos, quienes tienen que dormir encima de trozos de cartón y fundas y trasladarse a largas distancias para hacer sus necesidades fisiológicas. “Estamos muy cansados, si me dan mi liquidación me voy con mi familia para mi país”, afirma.
Varias fundas conteniendo las pocas pertenencias de los obreros cuelgan en varios árboles, así como pancartas donde denuncian la difícil situación por la que están atravesando.
Los haitianos afirman que permanecerán frente al ministerio ubicado en el Centro de los Héroes por tiempo indefinido hasta tanto se resuelva el conflicto.
La institución se ha desvinculado del caso
El pasado 19 de diciembre, el Ministerio de Trabajo aclaró a través de un comunicado que la salida al problema que afecta a los haitianos escapa de la competencia de esa institución, por tratarse de asuntos de los cuales ya están apoderados los tribunales de la República. No obstante, informaron que no ha cesado en sus esfuerzos para hallar un resultado satisfactorio, tanto para la empresa demandada como para los reclamantes.
