El equipo medico del país que atendió a Francina Hungría negó este miércoles que haya incurrido en mala practica medida como se ha rumorado y explicó que solo le hizo una sutura al ojo izquierdo, porque el derecho llegó con ausencia del órgano.
Los galenos, encabezados por los oftalmólogos Máximo Genao Bisonó y Nelson Mañón Castillo, explicaron que cuando la paciente llegó consciente y presentaba, luego de hacerles las imágenes, se determinó que “en el lateral derecho había un orificio de entrada de bala que produjo un estallido del globo ocular derecho con ausencia del contenido del mismo, consistente en cornea, iris, cristalino, úvea, vítreo y retina, restando solo alrededor del 70% del cuerpo esclerear, esto es el hueso”.
Explicaron que solo pudieron trabajar en el ojo izquierdo,que fue por donde salió el proyectil, y que era lo único que se podía hacer en ese momento. Señalaron que en el país existen protocolos para realizar este tipo de procedimiento y que apegaron al mismo.
Afirmaron que cuando Francina llegó a la clínica Abel González, de la avenida Abraham Lincoln, «fue evaluada y estaba despierta, orientada en tiempo, espacio y persona».
Agregaron que pretendían presentar a los medios de comunicación las diapositivas del procedimiento practicado, pero que luego desistieron para no violar el secreto médico y también porque hacerlo requería el permiso de la familia de la joven.
Los médicos ofrecieron los datos durante una conferencia de prensa para enfrentar los rumores de mala práctica médica que ha creado “una bola de nieve en las redes sociales”.
