Mientras el procurador aboga por el aumento en las penas, el presidente de la Suprema Corte de Justicia entiende que lo ideal no es trabajar por más sanción sino porque haya menos delitos. Francisco Domínguez Brito y Mariano Germán Mejía confrontaron criterios al emitir sus opiniones sobre las modificaciones al Código Penal, que contemplan aumento y cúmulo de penas. “Algunas veces parecería ser que el aumento de las penas se hace para que el que delinque no se reinserte socialmente”, dijo Germán Mejía.
Indicando además que el delito agrede y las penas no resuelven el problema. “Yo no me pronuncio nunca a favor de más represión, yo me pronuncio siempre a favor de más trabajo social para que haya menos infracciones”, sostuvo. Indicó, por ejemplo, que de una buena familia muy difícil nazca un delincuente. “Trabajemos por mejores familias, trabajemos por el desarrollo emocional y espiritual del ser humano, trabajemos por mejores ciudadanos y no hablemos de mayores penas”, reiteró.
En tanto, Domínguez Brito fundamenta su postura en la necesidad de ampliar los tipos penales y para que haya respeto a las víctimas. Admitió que el aumento en las penal, no resuelve el problema pero es un componente importante.
