Nueva York. Fiscales de la ciudad de Nueva York presentaron ayer documentos en la corte recomendando desestimar cargos de agresión sexual contra Dominique Strauss-Kahn, quien fue acusado de atacar en mayo a una camarera de hotel.
El caso, que causó sensación a nivel mundial, se disolvió entre conjeturas sobre la credibilidad de la mujer.
La acusadora, Nafissatou Diallo, y su abogado, Kenneth Thompson, se reunieron brevemente con representantes de la oficina del fiscal de distrito de Manhattan para discutir la decisión de continuar con el proceso.
Thompson no dijo qué sucedió en la reunión ni reveló qué le dijeron a su cliente, pero leyó un comunicado corto desaprobando a los fiscales por su manejo del caso.
«El fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance, ha negado a una mujer el derecho de obtener justicia en un caso de violación», señaló el abogado. «No sólo le ha dado la espalda a esta víctima inocente, sino que también le dio la espalda al forense, al examen médico y a otra evidencia física en este caso».
Una persona que pidió anonimato y con conocimiento del caso había dicho previamente a la AP que los fiscales estaban preocupados por la credibilidad de Diallo y por evidencia insuficiente de un encuentro sexual forzado. Diallo también está demandando a Strauss-Kahn buscando hacerlo pagar financieramente, si no es con su libertad, una medida que los abogados del diplomático dijeron que también erosiona la credibilidad de la acusadora.
Los fiscales señalaron en el legajo presentado ayer que no están seguros más allá de una duda razonable de que Diallo esté diciendo la verdad. Diallo, afirman, proveyó repetidamente información falsa a investigadores y a un jurado investigador acerca de su vida, su pasado y sus acciones tras el encuentro con Strauss-Kahn.
Podría salir hoy y regresar a Francia
El ex director gerente del Fondo Monetario Internacional, uno de los hombres más poderosos en su día, podría recibir hoy martes vía libre para abandonar el país y regresar a Francia si el juez Michael Obus retira los cargos que pesan sobre él, tal y como ha pedido la oficina del fiscal en una decisión que ha provocado las protestas de su supuesta víctima.
