Las primeras líneas en esta columna, al comenzar el año 2012, son para remachar sobre la necesidad de que se construyan en el país gimnasios para la práctica del boxeo. Es una reclamación que no me canso en plantear.
Da vergüenza que República Dominicana, un país que en los últimos años ha logrado un gran avance en la infraestructura -con el levantamiento de inmensas torres, plazas, lujosas residencias, entre otras millonarias edificaciones-, no tenga por lo menos modestos gimnasios para la práctica del boxeo.
El boxeo, un deporte que siempre ha sido marginado -tanto por el Estado como por la empresa privada-, sigue “huérfano” de gimnasios.
Hace poco más de dos meses, en las páginas deportivas de este periódico, se publicó un reportaje -en dos entregas y calzado con la firma de este servidor- en el que quedó claro cuál es la penosa situación por la que atraviesa el pugilismo nacional.
En el trabajo el exboxeador Antonio -Kid Can- Cruz, quien se desempeña como entrenador, narró las serias dificultades que atacan a los púgiles dominicanos.
Abogó porque el Gobierno central, a través del Ministerio de Deportes, por lo menos financie la construcción de modestos gimnasios. Kid Can Cruz está al frente del deteriorado gimnasio (¿?) que opera en el ensanche Ozama y que era propiedad del doctor Ramón Pina Acevedo.
La esperada protección
He escrito numerosos artículos, reportajes y crónicas en referencia a la penosa situación que abate al boxeo de nuestro país. Este deporte, que le ha entregado a la patria 16 coronas mundiales en el boxeo profesional, dos medallas (una de oro y otra de bronce) conquistadas en Juegos Olímpicos, y muchas logradas en competencias regionales (Juegos Centroamericanos y del Caribe y Panamericanos), no tiene protección.
El ministro de Deportes, Felipe Payano -hay que reconocerlo- ha sido un aliado del boxeo al que ha protegido. Lo ha hecho dentro de sus limitadas posibilidades presupuestarias. Sin embargo, el poderoso sector empresarial privado y el propio Estado no han tenido” compasión” con el boxeo.
