El Gobierno propuso ayer 10 puntos prioritarios para discutir por separado con los sectores empresarial, laboral y social para la firma del pacto eléctrico.Ayer se celebró un encuentro en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), bajo la coordinación de monseñor Agripino Núñez Collado, quien afirmó que la plenaria se hizo para ver los puntos de consenso y disenso. Señaló que en los puntos fundamentales las discusiones marchan bien.
Los 10 puntos que planteó el Gobierno, tienen que ver con la tarifa técnica, la negociación y revisión de los contratos con el sector privado, transparencia de la inversión en la industria eléctrica y con la energía limpia que aún no ha sido consensuada.
Posición
Sin embargo, el sector social considera que hay varios puntos que se deben aclarar antes de proceder a firmar el Pacto Eléctrico. En ese sentido, Fidel Lorenzo Merán, presidente de la Confederación Dominicana de Iglesias Evangélicas (Codue), dijo que todo parece indicar que el Gobierno tiene prisa por firmar el Pacto Eléctrico en este mes de agosto del 2016, con lo que se estaría festinando el proceso.
Fernando Peña, al presentar la posición del sector social, dijo que el Gobierno ha montado una encerrona a los grupos sociales para presentar los llamados 10 puntos prioritarios como si fuera el pacto, olvidando más de 450 propuestas que componen la matriz sintetizada por el propio Consejo Económico y Social (CES).
“Denunciamos que el Gobierno ya tiene un documento preparado con generalidades y simulaciones, que tira por el suelo todo el trabajo, consultas y esfuerzos realizados en más de dos años en todo el país, para presentar a la brigandina, un pacto que no es pacto con el interés único que esté convertido en la parte central del discurso del presidente el 16 de agosto”, señaló Peña.
En la reunión de ayer, solo expuso el sector social que pidió tomarse el tiempo necesario para las discusiones antes de firmar el pacto.
Dicen Gobierno se niega a bajar factura eléctrica
Los representantes del sector social afirmaron que el Gobierno niega rotundamente aplicar la reducción inmediata de la tarifa eléctrica en un 30%, tomando en cuenta, entre otros factores la baja en los precios de los combustibles y por el contrario acaba de imponer de manera clandestina un aumento en la factura al consumo de 200, 300 y 400% a los hogares.
