Al igual que la caoba, el roble o el cedro, la teca es un tipo de madera con la que se puede crear todo tipo de mobiliario, sobre todo por su belleza y durabilidad .La teca australiana es una de las maderas más adaptables a ambientes y climas. Se encuentra de forma natural en países como India, Birmania, Indonesia y Tailandia, pero de un tiempo para acá, sobre todo por el nivel de importación que genera, está siendo plantada en zonas de América Latina, como Jamaica, Honduras, Haití, Cuba, Trinidad, y actualmente está siendo producida en el país por la empresa Terra.
Annibale Bonarelli, gerente general de la compañía, dice que han elegido comercializar la teca australiana debido a su calidad estructural y estética, la cual es comparable con otras especies como el roble o la caoba y no es tan costosa como estas. “Es un árbol que alcanza los 30 metros de altura, por lo que produce una madera muy versátil, pudiéndose utilizar en todo tipo de ebanistería como puertas, gabinetes de cocina, sillas y recubrimientos, además de que resulta una madera muy llamativa por su tono color café claro con vetas oscuras”, dice Bonarelli.
El mobiliario de teca australiana es ideal para decorar tanto el interior como el exterior de las viviendas, ya que tiene un aceite natural que la hace impermeable, evitando que le salgan grietas, que se deforme o quiebre y que sea atacada por el moho y los insectos que generalmente comen madera. “La teca, de tonalidad oscura, queda bien en prácticamente cualquier estilo de decoración. Aunque esta madera sea perfecta para exteriores, cada vez está más extendido su uso para terrazas, gazebos y jardines”, comenta Bonarelli.
El mueble de teca es muy fácil de mantener. Si ha estado expuesto a los elementos y se deja sin tratamiento, la teca se enfrentará a una hermosa pátina de color gris plateado después de unos meses. Este cambio en la apariencia de la madera no afecta a la integridad estructural de los muebles, brindándoles una apariencia más llamativa.
Cómo limpiarla
Este tipo de madera es muy fácil de limpiar, solo hay que aplicar un abrillantador de madera para restaurar su color original, el cual puede ser devuelto lijando suavemente toda la superficie de cada pieza, trabajando siempre en la dirección de la veta. La aplicación de aceite de madera no se recomienda, ya que promueve el crecimiento de moho.
