El estado de emergencia por la COVID-19 empezó el 19 de marzo y es lo que ha marcado nuestras vidas estos últimos dos meses. El acontecer noticioso ha estado dominado, naturalmente, por todo lo relacionado con la pandemia: confinamiento casero, toque de queda, cantidad de contagiados y muertos, distanciamiento físico, parálisis económica,ansiedad por reapertura económica, parálisis escolar, inconsciencia e indisciplina popular, etc., a lo que se agregó la cuestión de la posposición de las elecciones. Temas cotidianos como delincuencia y feminicidios han dejado de tener actualidad, aunque hemos tenido casos como incluso viajes en yola a Puerto Rico. Ya luego veremos qué tanto la coyuntura coronavirus nos distrajo de las variadas actividades ilegales clandestinas de todos los días.