El presidente Luis Abinader, acompañado de la primera dama Raquel Peña, asistió este viernes a la reinauguración del Santuario Cristo de Los Milagros, situado en el municipio de Bayaguana, provincia Monte Plata.
Con una misa oficiada por el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria y el cardenal de Boston, Sean O’Malle, quien también es asesor del Papa Francisco, se dio apertura a la nueva infraestructura que fue construida por el Ministerio de Obras Públicas.
La eucaristía formó parte del acto de inauguración de la nueva estructura que alberga la Basílica de Bayaguana, edificada a petición de la Iglesia Católica.
El Ministerio de Obras Públicas elogió la delicadeza y detalles puestos en evidencia en la construcción del templo.
La institución constructora participó en el proyecto y en la construcción de distintas obras, reafirmando que la Iglesia Católica siempre tendrá un aliado en la gestión que encabeza el presidente Abinader y su responsabilidad al frente del MOPC.
También trabajó en la construcción de las vías perimetrales, colocación de carpeta asfáltica de tres pulgadas, construcción de 66 metros de muros de gaviones con una altura de 6 metros, 990 metros cuadrados de encache, construcción de una plazoleta en hormigón estampado de 7.200 metros cuadrados, más de 7 mil metros cuadrados de aceras y contenes, iluminación y señalización vertical y horizontal.
Sobre el Santuario
El Santuario Nacional del Santo Cristo de Los Milagros conlleva en su estructura todo lo que es la temática de la evangelización, y en su diseño cuenta diferentes historias en cada uno de los 17 vitrales, comenzando cuando el ángel se le presentó a la virgen, la crucifixión, la resurrección , todo esto centrado en representar la historia completa de Bayaguana.
El Santo Cristo tiene presencia en Bayaguana desde hace más de 419 años, en una iglesia sencilla donde según los peregrinos ha realizado milagros sorprendentes, lo que ha llevado a convertir el lugar en un Santuario Nacional. El Cristo es una talla que se remonta al siglo XVI, cuando se afirma que apareció en las playas.
