Federico García Lorca tiene en Bodas de Sangre su mejor tragedia por su universalidad, profundidad y complejidad. Este filme es una adaptación de su obra teatral basada en hechos reales ocurridos en Andalucía, España, y que fue escrita en el 1931 y su primera escenificación fue en Madrid en 1933. (Hay otra versión cinematográfica del 1981 por Carlos Saura en que se empleó la danza como lenguaje narrativo y sin el uso del lenguaje verbal). La adaptación La Novia es fiel al retrato del triángulo amoroso de una mujer con dos hombres, donde se trata con maestría el amor, la traición, el deseo, el desamor y las separaciones con desenlaces sangrientos, mortales, presentando una gran riqueza de detalles plasmados en escenarios desérticos y en casas ruinosas como ambientación que brindan mayor expresividad al ímpeto emocional de la historia: la novia se va a casar con su prometido, pero sucede que en su ser arde un fuego por otro hombre que es casado y con hijos, y de quien prueba ardores incontrolables (un poco aquello que donde hubo fuego cenizas quedan). Pues bien, al momento de la boda ella huye con aquel hombre que la apasiona y planta al novio, quien jura venganza ante la humillación e impulsado y manipulado por su madre. La estrategia narrativa del filme es una oda con fuerte apelación a la zarzuela, por lo que unido a la excelente puesta en escena y una actuación cuidadamente teatral (en el buen sentido de la palabra) da para un disfrute inmenso. Debe verse así, y primero ubicarse (ahórrese el gusto hollywodense) en las intenciones de los realizadores que solo buscan presentar un producto en que el cine esté al servicio del universo lorquiano. Es, por tanto, un filme que aglutina los elementos distintivos de las culturas ibéricas y mediterráneas. Hay quien sienta superficialidad, ligereza con respecto al soporte original, pero lo que definitivamente se descubrirá es el buen manejo estilístico con un buen contrapunto entre lo visual y la banda sonora que cautiva (si te dejas llevar). Se trata de un tipo de cine-ensayo en que para apreciarle se debe ir despojado de monomanías cinematográficas, ir con tranquila, sin prisa, apacible. Y es que para ver La Novia debes estar consciente de que es cine de arte, que es como decir cine de los sentidos.

HH HH Género: tragedia. Duración: : 93 minutos.

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