Mientras esperamos los datos sobre “tendencia a la baja” de la violencia de género y los feminicidios, prometidos por el procurador Jean Alain Rodríguez para este noviembre, octubre recién pasado concluyó como otro mes con saldo trágico de mujeres muertas por sus parejas, entre ellas dos adolescentes. En algunos de los casos las víctimas se habían querellado y tenían órdenes de protección contra sus verdugos. Esa irregularidad ya es frecuente y comunica la persistente ineficacia del Ministerio Público para prevenir la violencia contra las mujeres. Simplemente no logramos desestimularla, por más Procuraduría,Ministerio de la Mujer y más instituciones dizque abordando el flagelo. Evidencia de que la problemática requiere política de Estado; con entidades improvisando cada una por su lado no se avanza.

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