El inusitado incremento de la violencia criminal y delictiva que se registra en el país es motivo de mucha preocupación; amerita justo examen de fondo sobre sus consecuencias y, muy especialmente, sobre los elementos que la desencadenan. La violencia intrafamiliar registra un índice acelerado, con 18 feminicidios y 7 muertes de hombres a manos de sus parejas en lo que va de año. Los asaltos a mano armada, que no son un fenómeno nuevo, presentan modalidades de implicaciones mayores como las cometidas contra entidades financieras. Aparte de las acciones reactivas, hay que ir más a fondo en este flagelo que afecta a la sociedad en su conjunto.