Asunto del Ministerio Público, pero la repatriación de Argenis Contreras, principal imputado en el caso Omsa-asesinato Yuniol Ramírez, sumó puntos esta semana a la estrategia política del presidente Luis Abinader, junto con supresión del tristemente célebre departamento policial antinarcóticos (Dican) creado a finales de los 90, y la inauguración de nuevo sistema de monitoreo y seguimiento de todos los procesos de contrataciones públicas. Mientras la pandemia mantenga reducidas sus posibilidades de una obra material importante, el salvamento político del mandatario parece estará en agenda de desarrollo institucional: eliminación de entidades públicas sin razón de ser, combate a la corrupción y no impunidad; administración gubernamental transparente; justicia y procuraduría independientes. Bueno, lograría medalla de oro presidencial.

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