Después de varias décadas dormida, la ultraderecha está ahora en primer plano político en Europa. Ultranacionalistas de nuevo cuño, rabiosamente opuestos a la inmigración, que culpan de todos los males y de un supuesto estado de decadencia de sus respectivas naciones. Les disgusta la democracia liberal, porque, dicen, favorece la inmigración. Abogan por abandonar la Unión Europea para supuestamente recuperar control sobre sus fronteras. Esa fue exactamente la historia del Brexit. Los británicos se contagiaron del ultranacionalismo y xenofobia y salieron del bloque a fin de cerrar el país a la inmigración, solo para ver ahora que eso no redundó en fronteras más cerradas, menos inmigración, y, adicionalmente, tampoco en mayor bienestar económico.

Posted in Buen Oficio

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas