Lo más parecido a una irresponsabilidad es la reacción de Joe Biden cuando promete enmendar la prohibición de que la bandera LGBTQI+ sea izada en las embajadas de los Estados Unidos. Fue una concesión consciente que se hizo a los republicanos para poder aprobar la ley de presupuesto porque, como afirmó el propio presidente, había que mantener el gobierno en funcionamiento. Como esa se hicieron otras en el tema migratorio, demostración de que la política, más que de discursos y poses, se nutre de realidades. Muchos dominicanos de ambos bandos no podrán en el Mes del Orgullo Gay celebrar unos, y deplorar otros, el izamiento en nuestro país de la bandera multicolor, que en los días del embajador James “Wally” Brewster y esposo Bob se hacía en un ambiente festivo.

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