Huelgas, otro deporte

Si los médicos del sector público cobraran por el tiempo realmente trabajado en los centros de salud estatales en los cuales están “nombrados”, probablemente sus ingresos salariales habrían mermado bastante, al menos en la gestión que concluye del doctor Waldo Ariel Suero al frente del Colegio Médico Dominicano. Un calendario de protestas que consolidó 36 actividades, entre huelgas, protestas, encadenamientos y caminatas, arrojaron un promedio de una jornada y media cada mes. Si los salarios de sus asociados fueran en proporción a las consultas ofrecidas, de seguro que otro método de lucha utilizaría el liderazgo del CMD, sin abandonar sus responsabilidades con los pacientes. Pero como su “deprimido” les llega igual, consulten o no, “a luchar, a luchar, a luchar”.