En el país casi hubo una “revolución” en marzo cuando el periodista de The Boston Globe, Robert Hohler, publicó un artículo sobre una supuesta investigación pagada por David Ortiz en la que se responsabiliza a César el Abusador como la persona que lo mandó a matar. Las redes sociales cogieron fuego y gente de renombre y medios de prestigio aprovecharon para “acabar” con el trabajo realizado por Jean Alain y su equipo de la Procuraduría. Cuando Hohler admitió que nunca accedió a ningún informe sino que dio cuenta de una versión que recibió, el castillo empezó a desmoronarse, pero ahora todo se derrumbó al confirmarse que no existe nada escrito ni hay certeza de que se haya realizado investigación alguna. Saludos a Hohler, y a su periodismo de oídas.