Luis Abinader
Luis Abinader

En una rendición de cuentas que no se centró en el año anterior, sino en las realizaciones a lo largo de toda su gestión, el presidente Abinader compareció ante ambas cámaras legislativas, donde abundó sobre las obras pendientes de terminar.

O sea, es su cuarta y última comparecencia, por lo que consideró más apropiado un recuento general, por lo que eludió proyecciones y planes ambiciosos para lo que resta del 2024, con la mira puesta más allá, en un nuevo período de cuatro años.

Fue una intervención en la que en ningún momento se fue más allá de lo que demandan los artículos 114 y 121 de la Constitución, lo que, dicho así, podría parecer un simple trámite, casi una obviedad porque lo ordena la Carta Magna, pero es digno de resaltar cuando se rinden cuentas al pueblo, lo que sucede solamente donde imperan regímenes democráticos, un ejercicio de transparencia que los dominicanos debemos preservar y defender.

En lo esencial ha sido una pieza optimista con un mensaje clave: “Hoy estamos mejor”, y que pese al agitado proceso electoral por el que atraviesa el país, no tuvo atisbos de proselitismo político.

Inclusive, con todo y que el ambiente en el escenario parecía enrarecerse por la actitud de algunos legisladores opositores, no estuvo confrontador ni descalificador, con lo que hace honor a que allí estaba el presidente de la nación dominicana, no el líder del partido gobernante.

Así debiera ser siempre, sin importar banderías políticas, porque al ostentar tan elevada investidura no se es presidente de una parte, sino de todos, lo que engrandece a la República Dominicana
No se puede olvidar que ayer fue el aniversario de nuestra independencia, gesta gloriosa que el mandatario no pasa por alto y cuya preservación reivindica y estima que el mejor homenaje a sus próceres es seguir construyendo un futuro mejor.

Por lo que suscribimos lo dicho por Abinader al cierre de su intervención; de que la herencia de nuestros antecesores es el fundamento sobre el cual reposa nuestra grandeza y que “como ciudadanos responsables, es nuestro deber sostener la antorcha de la tradición y transmitirla intacta a las generaciones por venir”.

Posted in Editorial

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas