El pasado 3 de este mes, el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Antoniano Peralta Romero, anunció su renuncia a cobrar compensaciones previstas por ser miembro ex oficio de la Junta de Aviación Civil (JAC) y del Consejo Nacional de Alianzas Público-Privadas.
En cartas del 13 de noviembre a los doctores José E. Marte Piantini y Sigmund Freund Mena, directores de la JAC y de Alianzas Público-Privadas, respectivamente, Peralta Romero dice: Me dirijo a usted con el propósito de comunicar nuestra decisión de renunciar a partir de esta fecha a las compensaciones otorgadas como dieta a los integrantes del Consejo Nacional de Alianzas Público-Privada por la asistencia a las sesiones de trabajo. Presento esta solicitud a título personal, en mi calidad de miembro ex oficio de dicho consejo”.

Antes, el 15 de octubre, el director ejecutivo de la Autoridad Portuaria Dominicana (Apordom), Jean Luis Rodríguez, anunció que no recibirá beneficios, compensaciones y gastos personales en esa entidad porque no están contemplados en la Ley de Función Pública.

Y ayer el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo informó que sus representantes no recibirán viáticos ni compensaciones por asistir a las reuniones de consejos y comisiones de las que ese Ministerio es miembro.

La decisión fue informada mediante circular, que asimismo se apoya en la carta del consultor jurídico del Poder Ejecutivo, Antoliano Peralta Romero, que refiere que “con el artículo 27 de la Ley 105-13 se deroga el artículo 37 de la Ley 247-12 Orgánica de la Administración Púbica que daba la posibilidad de que los y las funcionarias devengaran una dieta en función de su asistencia a las sesiones”.

El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo sentencia en su circular: “La práctica de recibir una dieta por asistir a una reunión en un consejo directivo o comisión es contraria al uso eficiente del gasto público y aumenta los presupuestos de las instituciones en detrimento de la población que requiere de recursos ante el histórico mal uso de fondos públicos y la situación provocada por el COVID 19”.

Hay que esperar que ese temperamento nuevo y único impere en las demás instituciones del Estado. Representa un no a un pasado de aprovechamiento y dispendio.

Esperemos que otros continúen por ese camino.

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