El comunicado emitido tras la reunión extraordinaria de la Junta Monetaria del pasado martes es un documento con un importante mensaje de confianza.
Surgido tras un análisis coyuntural de la situación del mercado financiero internacional, por la quiebra de dos bancos estadounidenses, el documento del organismo superior del Banco Central y de la Superintendencia de Bancos de la República Dominicana es una precisión importante, que plantea que no hay susto porque nuestro sistema financiero es robusto y estable.
Por tratarse del ente cuya principal atribución es determinar las políticas monetaria, cambiaria y financiera, sus afirmaciones sobre la fortaleza del sistema representan un mensaje de confianza que despeja cualquier duda que pudiera surgir entre quienes no están enteramente empoderados de la situación.
Del sector empresarial también ha habido expresiones de confianza, consolidadas por el documento de la Junta Monetaria que se refiere a la quiebra y clausura de operaciones del Silicon Valley Bank y el Signature Bank, de los Estados Unidos.
“Se analizaron las causas que condujeron al cierre de dichas entidades, las medidas adoptadas por las autoridades del gobierno estadounidense y la evolución de los principales índices bursátiles en economías avanzadas”, dijo la JM en un documento difundido por el Banco Central.
La sustentación de la afirmación de la Autoridad Monetaria tiene dos componentes esenciales. Por un lado expone que del análisis de las interconexiones de las entidades bancarias locales, se estableció de manera precisa que la quiebra de Silicon Valley Bank y el Signature Bank no afecta al sistema financiero dominicano, porque este “no presenta interacción directa con dichas entidades internacionales”.
Por otro lado, y como prueba numérica, adicionó indicadores que avalan la fortaleza del sistema financiero dominicano, reflejado en provisiones de liquidez y de capital suficientes para absorber choques inesperados y mantener el funcionamiento ordenado del mercado financiero y de pagos.
Citó que a marzo en curso el coeficiente de morosidad de los bancos múltiples se mantiene en 1.0 % con reservas que superan en cuatro veces los créditos improductivos, mientras que la solvencia regulatoria ascendía a 15.3 % a diciembre de 2022, nivel superior al 10 % requerido por la Ley Monetaria y Financiera.
Son, en definitiva, indicadores y expresiones para confiar en la robustez de la banca dominicana.