Satisface la selección de la periodista Carmenchu Brusiloff Ugarte como Premio Nacional de Periodismo.
El jurado valoró la carrera de la profesional, que marca una época en el ejercicio de una rama del periodismo en la que es innovadora.
Sus crónicas de viajes y turismo, el enfoque creativo de la presentación de las actividades de la esfera social, la manera de enfocar sus trabajos, lo mismo que sus reflexiones acerca del quehacer humano, conforman todo un concepto sobre el ejercicio del periodismo.
Sus conocimientos la llevaron a manejar temas que se pueden considerar como información especializada, como los contenidos de la revista Aldaba, que tutela en el Listín Diario.
El premio es un reconocimiento a una trayectoria que ha dejado una impronta, una marca que sirve como pauta a jóvenes comunicadores.
El Premio Nacional de Periodismo es auspiciado por el Ministerio de Educación y el Colegio Dominicano de Periodistas y su implantación robustece el ejercicio del periodismo en la nación.
Felicitamos a Carmenchu Brusiloff Ugarte. Un premio merecido.
Las visitas sorpresa
No sabemos si recordarán aquella imagen publicada en portada por elCaribe hace cerca de seis años. Un presidente de la República saltando un charco en un camino vecinal.
La gráfica dio mucho de qué hablar. No se podía adivinar el alcance. Si se trataba de una simple caminata de observación a discreción de algún proyecto desconocido o qué. No hubo explicaciones.
Luego fue divulgada una segunda imagen igualmente impresionante. Y llegamos a advertir los riesgos del Presidente en “extraños recorridos” por lugares inhóspitos, con escaso acompañamiento.
Hasta que empezaron a divulgarse los encuentros cara a cara con comunitarios, casi siempre en comunidades rurales.
Eran los inicios de las visitas sorpresa que ya todos conocemos y que van por la número 200, que han parido igual o más cantidad de proyectos de impacto socioeconómico.
Se podrá cuestionar el alcance de los emprendimientos estimulados o apoyados por el Presidente Danilo Medina, pero la realidad es que han generado felicidad y empleos a miles de personas, y singularmente han establecido una relación cercana de un jefe de Estado con ciudadanos de los estratos más humildes de la sociedad.
Merecen reconocimiento.
