¿Y qué invento es ese de elegir a los jueces por votación popular? ¿Con base en cuáles consideraciones concurriría cada votante a elegir un miembro de la Suprema Corte o un juez de primera instancia? ¿Pronunciarían discursos los candidatos? ¿Ganarían los candidatos, hombres y mujeres, más bonitos y simpáticos? Y la pregunta fundamental: ¿Garantizaría esto una Justicia digna, imparcial y capaz?… (Tengo mis dudas. Basta mirar hacia México, donde acaban de inventar el mismo fracaso, al que concurrió apenas el 13 por ciento de los votantes, para saber lo que nos espera).