Felicito a Luis Abinader porque por primera vez escuché, completo y sin aburrirme, un largo discurso en gozoso domingo. Lo felicito por haber logrado la hazaña de mantenerme dos horas ante el televisor, sin tratarse de un concierto de Shakira. Lo felicito porque su discurso en voz bien alta, esta vez con saco y corbata, no tuvo desperdicio. Lo felicito porque todos lo aplaudieron de pie, menos los de la oposición (cuando mencionaba la corrupción o hacía alusión implícita a ella). Lo felicito, en fin, por haber elevado el optimismo del país… (Espero felicitarlo si torea con éxito la inflación, que puede echar todo a perder).

Posted in Fogaraté

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas