Los principales asesores extranjeros de los último dos presidentes, Mauricio De Vengoechea de Luis Abinader y Joao Santana, de Danilo Medina, luego de jugar papeles estelares en la campaña política para lograr el éxito de sus clientes, han generado situaciones que han salpicado la imagen de los gobernantes, aunque en ambos casos hay diferencias abismales.
De Vengoechea hace tiempo que anda en el país en labor de asesor, pues fue de los principales consejeros de Leonel Fernández durante sus último dos gobiernos, pero hasta ahora no era una figura de ruidos. Estuvo en pausa en el gobierno de Medina que prefirió a Joao Santana, que luego fue condenado en Brasil acusado de corrupción en el caso Odebrecht.
El papel de De Vengoechea en el gobierno de Abinader empieza a generar ruidos. Primero se supo en el país que supuestamente estaba asesorando al expreidente de Costa Rica, José María Figueres, que aspiraba a volver a dirigir esa nación en las recientes elecciones en las que fue derrotado por Rodrigo Chaves.
Lo que generó cuestionamientos fue una campaña en redes sociales con el suicidio como tema de fondo. Para esos días se publicó una foto de Figueres con el presidente Abinader, en una visita que le hizo el expresidente, pero que fue poco difundida en el país.
Ahora el ruido con De Vengoechea es porque supuestamente es el gestor de la contratación de empresas que venden cuentas falsas de tuwitter para generar tendencias positivas al gobierno y negativas a figuras de la oposición. Ciertamente, varios políticos de oposición han estado en tendencia en Twitter con calificativos despectivos que afectan la dignidad, el honor y buen nombre. Esto apenas empieza, pero lo importante no es como se comienza, es como se termina.
