No sé cómo algunas personas encuentran tan difícil reconocer sus defectos y virtudes.

Creo que más que incapacidad o imposibilidad de ver dentro de uno mismo, de lo que se trata es de falta de sinceridad y honestidad.

Toda persona se conoce a sí misma, sabe o al menos cree saber de lo que es y de lo que no es capaz.

Aunque es bien sabido que las circunstancias y determinadas situaciones serán las que al final nos demostrarán todo lo que somos capaces de hacer.

De igual manera, no se necesita ser un genio para reconocer las virtudes que poseemos. No creo que sea tan complicado o difícil darnos cuenta en que y para lo que somos buenos, excelentes o simplemente, notar en qué no deberíamos ni intentar probarnos.
No entiendo ni entenderé jamás, porque algunas personas necesitan encarecidamente la aprobación de los demás para estar seguros de que están haciendo lo correcto.

No sé por qué requieren de que otros les digan que son buenos en lo que hacen. Si no lo escuchan de otros, jamás se sentirán seguros.

Siempre me ha llamado la atención ver personas que desean hacer algo, tomar una decisión que consideran importante en sus vidas, e inician un foro de consultas entre los más cercanos. Preguntan a unos y otros, esperando escuchar una opinión favorable. En realidad están inseguros y quieren el visto bueno de aquellos a quienes consideran más inteligentes. Al final harán lo que desean y si sale mal, no será su culpa, será de sus consejeros.

No quiero decir que consultar, buscar opiniones o consejos sea algo malo, jamás. Es solo que nos hemos acostumbrado tanto a depender que hemos ido perdiendo nuestro criterio propio, hemos dejado de confiar en nuestro instinto y de esta manera estamos dejando dormir nuestra sagacidad y le hemos dado vacaciones permanentes a nuestra inteligencia.

Nos hemos olvidado de que podemos hacerlo todo o casi todo en esta vida y muchas veces lo hacemos solos, sin ayuda.

Posted in Mi Tiempo

Más de opiniones

Las Más leídas