El costo de la canasta nacional básica aumentó en los primeros nueve meses del año RD$2,408.36, en un comportamiento marcadamente “regresivo” de los precios de los productos y bienes básicos.
En términos relativos, el incremento fue de 6.00 % en la canasta nacional, que es un promedio de las cinco categorías de canastas que hay en función del poder adquisitivo de los grupos familiares o quintiles.
Una revisión al último costo de la canasta básica, muestra que la nacional pasó de RD$40,074.16 con que cerró al 31 de diciembre del 2021 a RD$42,482.52 al 30 de septiembre pasado.
En forma separada, los incrementos absolutos en los cinco quintiles fueron de la forma siguiente: quintil número uno, RD$1,842.25; en el número 2, RD$1,302.67; en el número 3, RD$2,321.81; en el 4, RD$2,527.32 y en el número 5, RD$3,600.24.
El primer quintil es el grupo familiar de menor poder adquisitivo y el número 5 alberga a las familias de mayores ingresos o capacidad de compra.
Aunque el costo absoluto va aumentando en dirección a los quintiles de mayor poder adquisitivo, el crecimiento relativo ha sido inverso, porque porcentual o relativamente ha sido mayor en los quintiles más bajos.
Mientras en el primer quintil el aumento relativo del costo de la canasta básica en el período analizado fue de 6.43 %, en el otro extremo, en el quintil 5, el de las familias de mayor poder de compra, el incremento fue de 5.43 %.
La regresividad
Ese comportamiento discriminatorio es el elemento regresivo, que es cuando los precios afectan relativamente más a los que menos tienen.
El contraste se evidenció en el comportamiento del índice de precios al consumidor de los primeros tres trimestres del año. Mientras el primer quintil, el de las familias de menor poder adquisitivo, reflejó un aumento absoluto de RD$1,842.25 en el conjunto de bienes y servicios que forman su demanda, el quinto quintil, el de las familias con más poder de compra, recibió un alza absoluta de RD$3,600.24, el doble del incremento del primer quintil.
Sin embargo, el aumento relativo, que es el que mide el impacto o incidencia de la variación de precios en el modo de vida, fue de 6.43 % para las familias más pobres y de solo 5.43 % para las familias más ricas.
El comportamiento del IPC ha ido perdiendo velocidad. El último informe del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) refleja y cita esa tendencia.
“La variación mensual del Índice de Precios al Consumidor continúa moderándose por segundo mes consecutivo, al registrar 0.29% en el mes de septiembre, luego del 0.21% del mes de agosto, ambas variaciones por debajo del umbral de 0.33% consistente con una inflación anualizada en el centro del rango meta de 4%±1%”, dijo el BC en el informe del comportamiento de la inflación de septiembre. “Con este resultado la inflación acumulada de enero-septiembre de 2022 se ubicó 6.01%,” agregó.
Los subsidios han ayudado a mitigar alzas
El BCRD dijo que “la tendencia a la baja que ha registrado la inflación interanual refleja la efectividad que han tenido los subsidios implementados por el Gobierno a los combustibles, la pausa a los ajustes de la tarifa eléctrica, así como las iniciativas para mitigar el impacto de los altos costos de los insumos de la producción agropecuaria, que ha permitido que la inflación del grupo alimentos no fuese mayor; mientras, las ayudas monetarias focalizadas han contribuido a que la población más vulnerable haya podido transitar de una mejor manera”.