Los jueces, fiscales, abogados e imputados del caso Odebrecht se volverán a ver las caras en los tribunales este martes, esta vez para conocer ampliamente las razones del envío del caso para la jurisdicción privilegiada y la Sala Penal de la SCJ.
Esta tarde el Pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) emitirá su sentencia integra sobre la declinación del caso para cinco de los seis imputados hacia el Distrito Nacional y el proceso del senador Tommy Galán a la Sala Penal de la alta corte, con lo que rompió con la aplicación del arrastre.
El pasado 17 de diciembre, tras conocer la fase de preparación del debate para el inicio del juicio de fondo, el Pleno, presidido por el magistrado Luis Henry Molina, en función de jurisdicción privilegiada, se declaró incompetente para conocer el proceso judicial por los 92 millones de dólares que Odebrecht admitió pagó en sobornos para la adjudicación de varias obras.
Al emitir su decisión sobre las peticiones hechas por los imputados, los jueces, con el voto disidente del magistrado Manuel Herrera Carbuccia, dispuso que las actuaciones y el proceso contra el empresario Ángel Rondón, el abogado Conrado Pittaluga, los exfuncionarios Víctor Díaz Rúa, Roberto Rodríguez y Andrés Bautista sea remitido hacia la Presidencia de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional para que éste su vez designe un Tribunal Colegiado para que conozca el proceso.
Asimismo, con los votos disidentes de los jueces Herrera Carbuccia, Francisco Jerez Mena, Fran Soto, María Garabito y Vanessa Acosta, el Pleno remitió el proceso del Galán, por quien el caso se conocía en la SCJ, hacia la Segunda Sala (o Sala Penal) de la alta corte.
También dispuso que en caso de un recurso de casación entonces lo conozca el Pleno, con lo que “se garantiza el derecho a recurrir”.
