SANTO DOMINGO, RD.- Un hombre de nacionalidad estadounidense acudió este viernes a las instalaciones de este medio para denunciar que fue víctima de una estafa millonaria, por parte de un dominicano, residente en la ciudad de Nagua, que le habría propuesto que invirtiera en la bolsa de valores.
Winstead Barnes narra que en agosto de 2020 decidió radicarse e invertir en República Dominicana, sin imaginar que sería víctima de una estafa millonaria y el calvario que tendría que pasar para reclamar justicia, ante los organismos persecutores de los crímenes y delitos de este país.
Relata que el señor identificado como Alberto Camacho, a quien la Policía busca con la orden de arresto número 0209-Diciembre-2022, se acercó a él para establecer una relación de amistad y luego que tomó confianza le sugirió que invirtiera en la bolsa de valores, a través de una presunta compañía que el fugitivo supuestamente conocía, pero se trataba de un caramelo envenenado.
Explica que el hombre le pidió que depositara 4 millones de pesos en cuentas bancarias de varios presuntos familiares de este, para iniciar el ofertado negocio en la bolsa de valores, petición a la que la víctima accedió sin imaginar que el hombre al que depositó su confianza le tenía una estafa preparada.
Con sed de justicia y la fe de conseguir su dinero, dice que acudió a la Fiscalía de Nagua a denunciar a su verdugo, razón por la que lo citaron y cuando acudió al requerimiento del Ministerio Público habría asumido el compromiso de pagar el dinero en varias partidas.
La Fiscalía sacó del expediente a posibles cómplices
Sin embargo, se queja de que la Fiscalía no redactó el acuerdo de pago, sino que lo habría dejado para que los abogados de la víctima y el victimario lo hicieran más adelante, pero el presunto estafador nunca apareció, pese a que ya han pasado más de dos años, con el agravante de que solo presentó un pasaporte como documento de identidad.
Además, sostiene que la fiscal que lleva el caso decidió sacar del expediente a los familiares del presunto estafador que recibieron el dinero, pese a que no solo podrían ayudar a dar con su paradero, sino que también los pudieran imputar por los delitos de complicidad y asociación de malhechores.
Es por ello que junto a su representante, la señora María Ferrera, solicita a las autoridades del Ministerio Público y la Policía Nacional que profundicen las investigaciones, para que den con el paradero del hombre que señalan como responsable de la estafa.