Para suplir el déficit de sangre que afecta el país y ante la inminente apertura del Hemocentro Nacional, inaugurado la semana pasada, un ex director del Hospital Salvador B. Gautier sugirió a las autoridades impulsar la donación autóloga entre los pacientes que se sometan a cirugías electivas en los hospitales.

Según el doctor José Checo Ramírez, esta técnica consiste en que el propio paciente haga una autodonación de sangre, diez o quince días antes de una operación que no sea de emergencia, de manera que si la requiere puede transfundirse con su propia sangre o, de lo contrario, pasa al banco suplir las necesidades del centro de salud.

El especialista en ginecología en el Centro de Obstetricia y Ginecología habla basado en su experiencia como director del emblemático hospital, a principios de la década de los 90, cuando por iniciativa del doctor Manelic Balcácer y con el respaldo del entonces director del antiguo Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), el doctor Ney Arias Lora y el jefe de cirugía del Gautier, Félix María Goico, se implementó el programa que hizo autosuficiente al centro en materia de sangre y hemoderivados.

“Por ejemplo, si un paciente se iba a operar de una hernia, donaba 500 cc de sangre y, si esa sangre no se utilizaba en él, entonces quedaba donada, y eso se hizo con todos los pacientes de cirugía. Fue tanta la sangre que llegamos a acumular que en ese momento el hospital tenía una sola nevera para almacenar la sangre y al cabo de dos meses ya nosotros teníamos cuatro neveras acumulando sangre. Teníamos tanta que no sabíamos qué hacer con ella y entonces empezamos a suplir de manera gratuita a los hospitales Moscoso Puello, Luis Eduardo Aybar y las maternidad de La Altagracia y del Seguro Social”, narró el galeno a elCaribe.

Recuerda que en ese momento los nueve quirófanos del hospital operaban a plena capacidad, de 7:00 de la mañana a 8:00 de la noche, lo que permitía colectar suficiente líquido diariamente.

Dijo que la iniciativa surgió tras detectarse que la sangre comprada por los pacientes no cumplía con los requerimientos de calidad necesarios lo que provocaba que con frecuencia se transmitieran enfermedades durante las transfusiones.

Eleva la calidad del donante

“Detectamos en un caso muy importante que decía que la sangre estaba negativa al VIH y estaba positiva. Al detectar eso, entonces decidimos analizar toda la sangre, sin importar que estuviera procesada y rotulada como negativa por los laboratorios de procedencia, eso dio origen a que le pidiéramos sangre a cada paciente para que el que la necesitara se le suministrara su propia sangre”, relató.

Sin embargo, el exitoso programa que se aplica en algunos hospitales de México quedó sin efecto luego que el doctor Checo Ramírez dejara la dirección del Gautier. “Yo le sugiero a este nuevo proyecto que es tan importante y positivo para el país que se integren todas las residencias médicas quirúrgicas del país para que todo paciente que se le vaya a realizar una cirugía electiva, diez o doce días antes, done 500 cc de sangre”.

Dijo que en unas dos semanas la sangre ha sido repuesta de manera normal por el organismo de una persona que tenga buenos niveles de hemoglobina.

A juicio del galeno, esto también abarataría los costos de las pruebas virales, ya que la sangre solo sería procesada y analizada una vez y, al mismo tiempo, daría seguridad a los pacientes que recibirían su propia sangre en caso de necesitarla.

Aumentar la confianza de donantes toma tiempo

Aunque la puesta en marcha del Hemocentro prevé una campaña para promover la donación de sangre, el galeno cree que tomará tiempo lograrlo porque en la actualidad existe la creencia de que se comercializará, como se piensa de los trasplantes. Dijo que cuando fue director del Gautier también fue gestor del primer programa de trasplante renal, haciendo entre uno y dos a la semana. Dijo que pidió al entonces presidente Joaquín Balaguer, la construcción de un hospital de diálisis y trasplante en la Plaza de la Salud.

El Hemocentro debe regular bancos privados

El galeno entiende que al entrar en funcionamiento el nuevo Hemocentro Nacional deberá supervisar de manera sistemática y sorpresiva todos los bancos de sangre privados que durante años han suplido la demanda de hemoderivados ante la ausencia del Estado, como una manera de garantizar controles estrictos de calidad de la sangre que suplen. “Si no hay control hay fallos que se producen que son fatales”. resaltó el profesional de la medicina que también dirigió el hospital docente Padre Billini.

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