El vicepresidente Rafael Alburquerque declaró este martes que el país debe sentirse amenazado con la advertencia del ex presidente Hipólito Mejía de que, si vuelve al Poder Ejecutivo, “ayudará” a sacar de la Suprema Corte de Justicia a varios jueces “pelafustanes”.
“Estoy alarmado con estas declaraciones, pero por supuesto, es una suerte para el país que Hipólito no será el próximo presidente; de ser así sería penoso y lamentable”, reaccionó Alburquerque.
Argumentó que la institucionalidad debe respetarse y que los jueces del máximo tribunal de justicia fueron elegidos por el Consejo Nacional de la Magistratura y no por el presidente Leonel Fernández.
A Mejía, candidato presidencial de Partido Revolucionario Dominicano (PRD), le molesta, según expresó en una conferencia, que en la SCJ haya miembros que no tienen los méritos suficientes para ocupar esa posición y sólo hayan llegado por intereses políticos.
Esa es una amenaza seria y penosa y más aun cuando viene de un aspirante a la Presidencia de la República.
Pero el Vicepresidente defendió la honorabilidad de los jueces y para hacerlo tomó como ejemplo al presidente, Mariano Germán, quien al momento de su selección se reputaba como dirigente del Comité Central del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Alburquerque se preguntó quién cuestiona la conducta de un juez como Mariano German, ni como abogado, “para poner un simple ejemplo” de las personas que componen la corte suprema.
Agregó que en caso de que Mejía gane las elecciones del mes próximo sería inviable hacer cambios en la SCJ, pero sostuvo que es probable que lo haga, violando la institucionalidad del país.
“Pero eso no va a pasar porque el próximo presidente será Danilo Medina”, concluyó.
Alburquerque, integrante del Comité Político del PLD, habló del tema luego de encabezar el acto de apertura de un seminario sobre expansión de cobertura de la seguridad social para el régimen subsidiado contributivo.
