VIENA (AP) — Un funcionario argentino, alto colaborador del director de la agencia de energía atómica renunció inesperadamente, dejando entrever tensiones entre el liderazgo de la organización, dijeron el viernes diplomáticos.
La decisión del subdirector general de la AIEA, Rafael Mariano Grossi, tiene lugar en un momento crítico para la Agencia Internacional de Energía Atómica. Se trata de la única ventana del mundo sobre el programa nuclear de Irán, que algunas naciones temen está a punto de acceder a la fabricación de armas atómicas, un objetivo que Teherán niega rotundamente.
Los inspectores de la AIEA supervisan las conocidas instalaciones atómicas de Teherán, inclusive la ampliación de su programa de enriquecimiento de uranio, que el gobierno dice que sólo tiene la intención de producir energía nuclear y otros usos pacíficos. Pero Estados Unidos, Israel, sus aliados y otras naciones temen que la República Islámica podría usar la tecnología para fabricar armas atómicas.
La agencia también trata de iniciar una investigación sobre sospechas de que Irán ha trabajado secretamente en el desarrollo de armas nucleares, después de más de cinco años de estancamiento. Irán niega ese trabajo y alega que las acusaciones se basan en trabajo de inteligencia falso de Israel y Occidente. Los dos bandos tienen previsto reanudar conversaciones sobre el asunto a mediados de mayo.
Grossi parecía un posible sucesor de Yukiya Amano, actual director general de la agencia, quien fue reelegido por segundo período a principios de este año.
Dos diplomáticos exigieron mantenerse anónimos a cambio de hacer declaraciones a The Associated Press sobre la renuncia porque no tenían autorización de hablar sobre los asuntos internos de la AIEA con los periodistas.
Uno de ellos dijo que Grossi, afirmó que iba a renunciar esta semana después que se le informó que su contrato no le iba a ser extendido. Señaló que Grossi ahora iba encabezar la delegación de su país, Argentina, ante la AIEA y otras organizaciones de la ONU en Viena. Asimismo esperaba ser el embajador argentino en Austria.
Los funcionarios de la AIEA se abstuvieron de hacer declaraciones.
