Buena calma

“A fulano no lo mata nadie”, nuestra expresión en referencia a personas que característicamente honran la calma. En casos negativos extremos equivalen a “sinvergüenzas”: gente si no irresponsable, desidiosa, inactiva o poco empática. Del lado positivo, personas que no se irritan fácilmente. Son de naturaleza bonachona, comprensiva y paciente. Toman acción sin prisas ni “piques”, no creen en incomodarse. Esa es una pertinente manera de ser, en contraste con la de la gente que tiende a “acelerarse” o “hacer mala sangre” ante cualquier trastorno. Alterarse por situaciones sirve de poco. Inconvenientes se solucionarán en su tiempo, tomando acción contra ellos sin desesperaciones. Busquémosle la vuelta sin ser calmosos que rayen en lo conchudo ni nerviosos que crispen.