Santiago. La Iglesia católica califica como un contraste vergonzoso, la situación de miles de envejecientes y calificó de provocador las altas pensiones y salarios que reciben algunos funcionarios.Lamentó que los cheques que reciben los pensionados ni siquiera les alcance para mal nutrirse, mientras funcionarios han hecho del erario una piñata. En ese sentido llamó al Gobierno a crear políticas públicas que permitan a aquellos que están en el ocaso de su existencia tener días felices, se les brinde un mayor apoyo a los hospicios y casas en donde los atienden.
“Es una escena desgarradora. Cada día crece el número de ancianos que deambulan por nuestras calles en busca de una limosna. Es triste contemplar el abandono a que son sometidos por sus familiares y el Estado”, señala Iglesia católica a través del semanario Camino, órgano del arzobispado de Santiago.
Advierte que estos ancianos desprotegidos reflejan en sus rostros la amargura de ver transcurrir sus días sin esperanza. Y agrega, que su situación empeora cuando les llega una enfermedad, debido a que están desprotegidos en extremo. “Sólo el 50 % de nuestros mayores tienen la tarjeta del Seguro Nacional de Salud (Senasa), pero les sirve para nada, porque no les facilitan los medicamentos necesarios ni aun estando ingresados en un hospital”, indicó Camino.
La Iglesia también califica como escandalosas las desigualdades sociales, pero advierte que “un día tendrá que ser diferente. Cuando en un país los envejecientes pasan por esta calamidad estamos frente al signo más visible del grado de deshumanización a que está llegando esa sociedad”.
El semanario Camino dice que llegó el momento de brindarles a “los viejitos” días más esperanzadores, revisar las pensiones indignantes, para que aquellos que entregaron sus mejores años produciendo con su trabajo, les lleguen las riquezas que otros disfrutan. Finalmente, Camino precisa en su editorial que la dignidad de los envejecientes deben ser rescatada.
