Un crimen y un reclamo en Villa Altagracia

El despertar de la niña de 10 años aquel jueves fue la peor pesadilla para toda su vida. Al levantarse, horrorizada, encontró…

El despertar de la niña de 10 años aquel jueves fue la peor pesadilla para toda su vida. Al levantarse, horrorizada, encontró en la habitación de su madre su cuerpo amarrado, con sangre y muerta. De inmediato el bullicio, los lamentos y las conjeturas.

El ministerio público de Villa Altagracia y los policías acudieron a la escena… sangre, violencia en aquel cadáver de una mujer joven que también había sido violada. A casi una semana del crimen, los hermanos de Leonora Martínez Frías, conocida popularmente como Evelyn, fueron a llorar sus penas al palacio de la Policía Nacional… y nada.

 El pueblo reclama justicia, porque si no, habrá linchamientos y turbas enardecidas detrás de asaltantes y ladrones, matones y carteristas por las calles de Villa Altagracia.

Me dicen que se reúnen evidencias, a casi una semana de aquel episodio bestial. Que hay otros litorales hacia donde se enfilan las indagatorias.
Todo eso es comprensible. Existen reglas y límites impuestos por un tal código procesal penal que obliga la presentación de pruebas consistentes e irrefutables para poder someter a la Justicia a un imputado o sospechoso de cometer un crimen.

Es verdad. Ahora, en casi una semana no se han obtenido resultados de pruebas de ADN del semen o de otro rastro dejado por el o los culpables de la violación y muerte de Evelyn. ¿Y dónde está la eficacia de una llamada Policía Científica que se supone debe contar con profesionales dotados de mecanismos suficientes para descubrir cosas, donde los demás no alcanzamos a ver nada?

La verdad es que el procurador fiscal, Juan Medina, es un profesional a toda prueba, serio y hasta sicorrígido a la hora de cumplir con su deber, pero ya está bueno, la gente reclama justicia y el pandero está en sus manos y en las manos de los oficiales policiales que investigan tan terrible asesinato.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas