Santiago. La lucha contra la violencia y la criminalidad ha quedado prácticamente en mano de la Policía. La población no percibe integración de las autoridades municipales ni de los representantes del Gobierno. Sin embargo, se espera que con la llegada del 9-1-1 a Santiago, desaparezca la condición de incertidumbre que vive actualmente la provincia. Mientras esto se produce, la gente tiene que lidiar con la sorpresa del día a día, ya que cada hecho supera en maniobras y creatividad los anteriores. A pesar de que los actos delincuenciales y la criminalidad atacan a ricos y pobres, no se levantan las voces para reclamar más acciones en favor de la protección ciudadana y los problemas de inseguridad. Las marchas y concentraciones se han sectorizado.
La última manifestación de protesta la encabezaron los motoconchistas para pedir que cesen los asesinatos ya que, según el presidente de la federación que los agrupa, Danny Minaya, 49 cayeron en los últimos dos años, siete de ellos el pasado mayo.
Integración
Las acciones delincuenciales no han provocado una reunión en la Gobernación Provincial, como se llegó a hacer anteriormente, ni con los demás sectores representativos de Santiago, para plantear alternativas a lo que ocurre actualmente y que debería ser responsabilidad de todos. Tampoco el gobierno local se ha hecho parte de esta responsabilidad y en vez de ser parte de la solución del problema, lo ha profundizado al retirar de los parques los vigilantes municipales para dejarlos a merced de los delincuentes.
La oscuridad de algunas zonas, al igual que la falta de vigilancia, se ha convertido en aliada para que los delincuentes cometan robos y los atracos. Además, en muchos sectores sus calles lucen vacías temprano de la noche porque la gente recoge temprano para evitar estar en las estadísticas de los hechos delictivos que afectan la provincia.
Esperan que con el 9-1 -1 mejore la seguridad
Los promotores de la expansión del 9-1-1 hacia la región del Cibao han dicho que este proyecto transformará Santiago. Los edificios para su alojamiento están avanzados y en un mes inician su equipamiento para ser inaugurado antes de que concluya el año. De acuerdo a lo proyectado, en Santiago serán instaladas mil 799 cámaras y otras mil 51 para Puerto Plata.
