Descubren la clave biológica para tratar la calvicie

Una pista biológica ha elevado la posibilidad de desarrollar un tratamiento para detener o incluso revertir la calvicie.

Una pista biológica ha elevado la posibilidad de desarrollar un tratamiento para detener o incluso revertir la calvicie. Científicos estadounidenses identificaron una proteína que desencadena la pérdida del cabello en estudios realizados en hombres calvos y ratones de laboratorio. Según revelaron en la revista Science Translational Medicine, ya están en desarrollo medicamentos que atacan ese proceso.

La mayoría de los hombres comienzan a quedarse calvos a mediana edad y cerca del 80% de ellos tienen alguna pérdida de cabello antes de llegar a los 70 años de edad.

La hormona sexual masculina (testosterona) juega un papel clave, al igual que los factores genéticos. Esto hace que los folículos pilosos se contraigan y eventualmente se hagan tan pequeños que se vuelven casi invisibles, lo que lleva a la aparición de la calvicie.

El profesor del departamento de Dermatología, George Cotsarelis, quien dirigió la investigación, dijo: “Demostramos que la proteína prostaglandina era elevada en el cuero cabelludo sin pelo de los hombres y que eso inhibió el crecimiento del cabello. Así que identificamos un objetivo para tratar la calvicie”.

Varios medicamentos conocidos que apuntan a este proceso ya han sido identificados, agregó, incluyendo algunos que están en pruebas clínicas. 

Es importante saber que la pérdida del cabello puede deberse a otros trastornos, como por ejemplo, si la pérdida del cabello se presenta en parches, se muda mucho pelo, el cabello se rompe o se presenta pérdida del cabello junto con enrojecimiento, descamación o dolor es posible que se necesite una biopsia de piel u otros procedimientos para diagnosticar otros trastornos que puedan estar causando la pérdida del cabello.

El análisis del cabello no es preciso para diagnosticar calvicie debido a trastornos nutricionales o trastornos similares. Sin embargo, puede revelar la presencia de sustancias como arsénico o plomo.

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