En tiempo de vacaciones escolares muchos padres inscriben a sus hijos en campamentos de verano, en donde ellos pueden disfrutar, aprender y “quemar las energías” propias de los pequeños. Pero no siempre se cuenta con el dinero para “invertir” en campamentos; no por eso los pequeños tienen que dejar de disfrutar de sus vacaciones escolares, pues existen muchas opciones para disfrutar en familia, divertirse, aprender y gastar poco dinero.
Según los psicólogos, los niños y jovencitos, al igual que los adultos, necesitan las vacaciones para desconectarse de sus rutinas habituales: madrugar, ir a la escuela, hacer tareas y actividades extracurriculares, acostarse temprano y repetir el ciclo. Ellos también esperan con ansias la época de “no hacer nada”, de relajarse, de disfrutar antes de entrar en el ajetreo del nuevo año escolar.
Teniendo en cuenta su edad, sus gustos, intereses y hasta cuánto aguanta el bolsillo puedes elegir los fines de semana para ir a la playa, a la piscina, hacer turismo interno, visitar familiares y amigos, disfrutar de parques, zoológicos y los diferentes museos de la Zona Colonial, principalmente.
Sin embargo, de lunes a viernes no puedes dejarlos jugar todo el día, para evitar que tus chicos se aburran. Hay muchas cosas que se pueden realizar en la casa sin la necesidad de gastar mucho dinero, cosas muy simples con las que los niños se divierten.
Qué hacer
A la mayoría de los chicos les gusta dejar volar su imaginación. Dibujar es una manera excelente de desarrollar su inocencia y creatividad. Podría serles atractivo realizar manualidades que sean útiles para ellos como bisutería, pósters para sus cuartos; además de estimular su creatividad y desarrollará sus habilidades motrices. También, puede ser un buen periodo para aprender un poco de música.
Según los expertos, las vacaciones escolares son una buena temporada para enseñarles a los niños la importancia del orden y la responsabilidad. Enséñales pequeñas tareas domésticas en función del carácter, aptitudes y posibilidades reales de cada hijo. Redecorar el cuarto, limpiar clósets, sacar juguetes y renovar son buenas ideas para que tus chicos se involucren en los quehaceres del hogar. Además de que ellos desarrollarán su sentido de responsabilidad, será un buen momento para compartir en familia y divertirse.
Aunque pueda resultar un poco engorroso (sobre todo, cuanto más pequeños sean los cocineros), puede ser muy divertido jugar a los chefs. Hazuna pizza. Puedes comprar las bases hechas, tomate fritos, queso para fundir y una infinidad de posibles ingredientes para que los niños los combinen a su gusto e incluso dibujen rostros con ellos. Hacer bizcochos, dulces y galletitas con tus chicos puede ser más divertido de lo que crees. Una de las actividades favoritas de los pequeños es estar pegados a sus consolas de video. En lugar de dejar que jueguen solos, comparte con ellos. De esta forma no solo reforzarás las relaciones familiares sino que estás pendiente en qué invierten su tiempo.
Para los niños preadolescentes, que ya no se entretienen con juegos infantiles, otra buena idea es realizar fiestas en sus casas en donde los padres se reparten los gastos. A veces los papás tienden a gastar más dinero cuando sus hijos van al cine que realizando una actividad en casa. El deporte es una actividad física que estimula la disciplina en chicos y grandes y desarrolla en el niño habilidades motoras que contribuyen a su bienestar físico y mental. Las vacaciones son temporadas propicias para iniciar la práctica de voleibol, natación, baloncesto o cualquier otro deporte. Cuando un niño realiza un deporte en especial, esto favorece el desarrollo de su autoestima ya que siente que es “capaz” de realizar alguna destreza en particular.
Diferente
No existe entretención más simple y agradable que una sesión de cine en casa, llena de magia.
Dato
Durante las vacaciones, los niños pueden jugar y también realizar otras actividades que promuevan la responsabilidad.
