Santiago. En la escuela del sector Villa Centro, sus 123 estudiantes junto a sus padres y maestros iniciaron el año escolar con una misa.En sus oraciones clamaban por más medidas de seguridad ante los constantes robos que han dejado desvencijado el plantel. El sacerdote José Abreu, quien tuvo a su cargo el oficio religioso, dijo que esas acciones vandálicas son fruto del desorden general y la descomposición social en la que ha caído el pueblo dominicano.
En dos ocasiones, los delincuentes han robado butacas, 14 puertas y hasta los lavamanos e inodoros de los baños.
También cargaron con decenas de sillas y algunas butacas, pertenecientes a la junta de vecinos. “Primero fueron siete puertas, pusimos nuestras quejas para que sea colocada vigilancia nocturna, no nos hicieron caso y luego se llevaron otras siete más”, expresó Carmen Castillo, presidenta de la sociedad de padres y amigos de la escuela.
Ante el temor a la delincuencia, la directora del centro escolar junto a la asociación de padres decidió guardar todas las butacas en un cuarto y son sacadas para colocarlas en cada aulas, en el horario de clases.
Castillo, al hablar con reporteros de el Caribe, advierte que tendrán que asumir nuevos métodos de protestas para reclamar mayor atención.
Actualmente los niños no pueden ir a los baños pues carecen de inodoros, pese a la promesa de que serían también instalados durante el período de vacaciones.
