La estructura arquitectónica del paraboloide del Palacio de Bellas Artes inspiró al dramaturgo Haffe Serulle a escribir su nueva obra.Se trata de Tinglado de acero, la cual se presentará en ese espacio del 18 al 31 de este mes, a partir de las 8:00 de la noche. El montaje y producción de la obra cuentan con los auspicios del Ministerio de Cultura, la Dirección General de Bellas Artes y la Fundación Ciencia y Arte.
Serulle, quien acaba de ganar el Premio Nacional de Teatro Cristóbal de Llerena, con Un sueño azul para morir, considera que el montaje que llevará a escena es ante todo un amplísimo registro sonoro y gestual. “Es un verdadero canto a la elocuencia de la palabra y al gesto infinito”, asegura.
En Tinglado de acero, la conciencia se convierte en el eslabón que une el desarrollo de la trama, en la que dos seres se enfrentan a la oscuridad para encontrar la luz, y así redimir a la humanidad del caos, la desigualdad y la injusticia. Deciden buscar una luz en el cielo, sin embargo, mientras más altura alcanzan, la oscuridad se vuelve más intensa. Así, mientras tratan de atrapar un destello que los guía, reconocen que deben bajar porque la oscuridad solo se combate desde ella misma.
La obra cuenta con la actuación de los jóvenes Licelotte Nin, Leytter Mena, Belnis Aquino y Gianny Beltré. La escenografía y el vestuario están a cargo de Santiago Alonzo. Serulle, un veterano darmaturgo que ha ganado varios premios importantes en su carrera, advierte que Tinglado de acero no es apta para público de sala y que la asistencia estará limitada a cincuenta espectadores por función. Las boletas están a la venta, en la boletería del Palacio de Bellas Artes.
