Varios hombres encapuchados mataron ayer a tiros a un hombre que transitaba por las proximidades de un billar en el sector Capotillo.Miguel Lorenzo, de 44 años, recibió un balazo mortal en el abdomen con entrada y salida, supuestamente disparado por unos tales Fustel y Ney.
Estos hombres y otro no identificado aun por la Policía se presentaron al billar “D’ Cali, Una Vaina Bien”, ubicado en la calle respaldo José Martí esquina 42 del referido sector, y la emprendieron a tiros contra todos los presentes.
En la balacera, que la Policía presume está vinculada a problemas por ventas de drogas, también resultaron heridos Javier González Cruz, Junior Marte Reynoso y Abel Vargas Nova.
La Policía dijo que busca a Fustel y a Ney, para apresarlos y someterlos a la justicia. Lorenzo vivía en el ensanche Luperón, aunque nació y se crió en Capotillo, donde la noche de ayer también falleció de forma trágica.
La víctima se dedicaba a la decoración en yesos. Mientras esperaba el cadáver de su hijo desde Patología Forense, su madre, María Lorenzo, explicaba que siempre lo aconsejaba para que no fuera tanto por ese lugar donde lo mataron, por las continuas balaceras que suelen producirse.
“Es que yo conozco a Capotillo muy bien. Duré 30 años viviendo en ese lugar”, decía doña María. Pero no sola esta mujer se queja de los recurrentes problemas de inseguridad de Capotillo.
El dirigente comunitario de ese sector, Abel Rojas, aseguró que la noche que mataron a Miguel Lorenzo, en el sector escuchó un tiroteo que se prolongó por un largo rato.
“Eso aquí es común. Lo de seguridad ciudadana aquí no existe”, sostuvo Rojas. Esta queja es compartida entre los habitantes de ese sector.
Otros entienden que los agentes policiales en Capotillo“se entienden muy bien con los delincuentes”.
En la “escena del crimen” todo lucía muy normal
En la mañana de ayer, en la esquina que forman las calles respaldo José Martí y la 42, donde mataron a Miguel, ayer no había ni un policía resguardando la escena del crimen. Todo lucía normal, como si nada hubiera pasado. Esto a pesar de que este homicidio se produjo a las 11:45 de la noche y todavía no había nadie detenido, ni siquiera para fines de investigación.
