Dajabón. Cientos de comerciantes de la República Dominicana y Haití protestaron ayer por la suspensión del mercado binacional que cada lunes y viernes se desarrolla en la zona fronteriza de Dajabón.Desde las primeras horas de la mañana de ayer los comerciantes criollos y haitianos esperaban que las autoridades de ambos países abrieran las puertas del paso fronterizo, pero poco después de las 7:30 de la mañana fueron informados por un funcionario de la alcaldía de Juana Méndez que el tradicional mercado no se realizaría.
Todavía al mediodía algunos comerciantes esperaban que se iniciara el mercado, pero el presidente de la Asociación de Comerciantes de Dajabón, Escolático Suero, dijo que fueron informados por las autoridades del vecino país sobre la suspensión de las actividades.
De acuerdo con el dirigente comercial, las autoridades haitianas alegaron que se acogen a la veda impuesta por el Ministerio de Agricultura de Haití a los productos agrícolas dominicanos.
Suero lamentó el hecho, a la vez que afirmó que ello implica pérdidas para los productores criollos por más de RD$50 millones, en rubros perecederos como legumbres y hortalizas.
En tanto que Ronald Desamoner, funcionario del Programa de Desarrollo Transfronterizo, que ejecuta el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), también se mostró apenado, señalando que “con esta medida pierden ambos pueblos”.
Uno de los comerciantes haitianos, Claude Portier, dijo que fue informado por el alcalde de Juana Méndez, Boselin Joazard, de que no habría mercado.
Sin embargo, ninguna de las autoridades locales dominicanas ni haitianas, hasta esa hora se había informado sobre las causas de la suspensión del mercado.
Vicecónsul: algo grave
Al referirse al cierre del mercado bilateral, Mateo Espinosa, vicecónsul dominicano en Juana Méndez, afirmó que la decisión de suspender el mercado es de las autoridades haitianas, y calificó el hecho como grave, debido a las tensiones que viven ambos países por el fin del Plan Nacional de Regularización de Extranjeros y el pronto inicio de las deportaciones de los haitianos. Espinosa recordó que el 80% de la población de Dajabón vive de forma directa o indirecta de ese mercado, el cual, a su entender, “se ha constituido en una gran zona franca que beneficia a ambos países”.
Suspensión no cayó bien entre comerciantes
A todo lo largo del río Masacre se observaban a cientos de nacionales haitianos en espera de cruzar hacia la zona del mercado que está ubicado inmediatamente se cruza el río. La suspensión del mercado desató la protesta de los comerciantes dominicanos, quienes afirmaron que se han perjudicado con esa medida. Mientras tanto, las autoridades haitianas solo dejaron pasar al lado dominicano a los ciudadanos que mostraban pasaporte con sus visas.
