Los organismos internacionales proyectan que la economía dominicana mantendrá este año sus altos niveles de crecimiento. El FMI pronostica un 5.4%, el Banco Mundial calcula un 4.6%, BID prevé un nivel más conservador de 4.5% y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) sitúa su proyección de crecimiento de la economía dominicana en el 2016 en 5.2%. Con pequeñas diferencias, los principales organismos internacionales coinciden en que este año la economía crecerá alrededor de un 5%.
El “consenso” en las proyecciones tiene como elemento común que habrá un crecimiento más moderado que en los dos años anteriores, cuando el producto interno bruto dominicano (PIB) promedió un 7% de crecimiento. Desde distintos rankings las proyecciones coinciden en que la economía dominicana estará entre la posición uno y dos de los países de la región que más crecerán en el año que transcurre.
Todos los vaticinios están en línea con los cálculos hechos por el Gobierno Central y el Banco Central, y reconocen que aunque el crecimiento sería el mayor de la región, reflejará disminución de la velocidad de expansión en el PIB.
De las cuatro proyecciones, la más agresiva es la del FMI que aunque contempla que el crecimiento se desacelere, al final de año lo pronostica en un nivel de 5.4%, mayor incluso que el tomado en cuenta por las autoridades fiscales para confeccionar el presupuesto general del 2016. La tasa referida en el diseño de ese instrumento fue de 5%.
La estimación más conservadora de los organismos internacionales corresponde al Banco Interamericano de Desarrollo, organismo que tiene la mayor cartera de préstamos multilaterales en el país. La proyección del BID es de que el crecimiento del PIB dominicano en el 2016 será de 4.5%.
El FMI, según el reciente informe que rindió en Washington sobre su última visita a la República Dominicana, expresa que el “desafío para las políticas macroeconómicas será sostener altas tasas de crecimiento y abordar los desafíos pendientes de la pobreza y la desigualdad, reforzar aún más la situación fiscal, limitar los riesgos de los efectos internacionales negativos y hacer frente a los legados de largo plazo en el sector eléctrico”.
Cálculos locales
El Banco Central, en tanto, hace su proyección en el programa monetario para el 2016, documento en el que dice que el PIB “continuaría su ritmo de moderación del crecimiento, para situarse en un rango de 5.0% – 6.0% en 2016”.
Precisa, asimismo, que “para 2016, el balance de riesgos para las previsiones de crecimiento económico está sesgado al alza, dado que el PIB real se ha mantenido creciendo por encima de lo previsto en 2015. Asimismo, se pondera una mayor expansión del gasto público vinculado al ciclo electoral. Por el lado de los precios, las estimaciones de inflación se mantendrían estables para 2016”.
De su lado, el Ministerio de Hacienda al diseñar el presupuesto del año en curso, expuso como uno de sus supuestos básicos que para el 2016, “se espera que la economía alcance un crecimiento de 5.0%”. La práctica de Hacienda es asumir los cálculos del Banco Central y del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, al momento de diseñar el presupuesto general del sector público.
